Darla no había estado feliz con mi traslado al comedor. Me quería en el campo. También quería que supervisara a Euge. De acuerdo con Euge, ya no estaba viendo a Nico. Se había reunido en la cafetería porque la había llamado veinte veces esa tarde. Le dijo que si iba a ser su secreto sucio todo había terminado. Él le había rogado y suplicado, pero se negó a darla a conocer en sus circulo de amigos, así que ella lo dejó. Me sentía muy orgullosa de ella.
El día siguiente era mi día libre y Euge ya había venido a buscarme para saber si seguía en pie nuestros planes. Por supuesto que sí. Yo necesitaba un hombre, cualquier hombre, para alejar mis pensamientos de Peter.
Seguí a Jimmy a todas partes durante todo el día. Él me entrenaba. Era atractivo, alto, carismático y muy gay. Los miembros del club no sabían esto, sin embargo. Coqueteaba con las mujeres sin pudor. Ellas se sentían alagadas.Él miraría a hacia atrás y me guiñaría un ojo cuando alguna le susurrara cosas atrevidas en su oído. El tipo era un conquistador y uno muy bueno.
Una vez que su turno terminó, nos dirigimos de nuevo a la sala de descanso del personal y colgamos los largos delantales negros que teníamos que llevar sobre nuestro uniforme.
Jimmy:Serás muy buena, Lali. Los hombres te aman y las mujeres están impresionadas por ti. Sin ofender, cariño pero las chicas con el pelo largo y castaño como el tuyo normalmente no pueden caminar en línea recta sin reírse
Lali:—le sonreí— ¿En serio? Pensé que esas eran las rubias. Pero me ofende ese comentario
Jimmy:—rodó los ojos y extendió la mano para acariciar mi cabeza— No, no te ofende. Sabes que eres una chica ruda. Y yo soy rubio —me miro mal y yo reí—
Xxx:¿Ya estás coqueteando con la nueva camarera, Jim? —preguntó la voz familiar de Agus. Jimmy le lanzó una sonrisa arrogante—
Jimmy:Me conoce demasiado bien como para decir eso. Tengo un gusto específico —bajó su voz a un susurro sexy mientras arrastraba sus ojos por el cuerpo de Agus—
Miré a Agus, quien fruncía el ceño desagradablemente y no pude evitar reírme. Jimmy se unió a mí.
Jimmy:Me encanta hacer sufrir a los chicos hetero —susurró en mi oído, luego me palmeó el trasero y salió por la puerta—
Agus rodó los ojos y se acercó a mí una vez que Jimmy se hubo ido. Al parecer, era consciente de la preferencia sexual de Jimmy.
Agus:¿Disfrutaste el día? —preguntó cortésmente—
Había disfrutado de mi día. Inmensamente. Era un trabajo mucho más fácil que sudar en el calor todo el día, lidiando con los viejos pervertidos.
Lali:Sí. Estuvo genial. Gracias por hacer posible para mí trabajar aquí
Agus:—asintió— De nada. Ahora,¿Qué te parece celebrar tu promoción con la mejor comida mexicana en la costa?
Me invitaba a salir de nuevo. Debería ir. Sería una distracción. Él no era exactamente el tipo chico normal que yo buscaba, ¿pero quién dijo que iba a casarme con él y tener a sus bebés?
Una imagen de Peter destelló en mi mente y su expresión atormentada de anoche. No me atrevía a salir con alguien que él conocía. Si realmente quiso decir lo que dijo entonces, yo debía mantener su mundo a un brazo de distancia. No pertenecía a ese mundo.
Lali¿Puedo pasar? No dormí anoche bien y estoy agotada
La cara de Agus decayó, pero sabía que no tendría problemas en encontrar a alguien que tomase bien mi lugar.
Agus:Hay una fiesta esta noche en lo de Peter, pero supongo que lo sabías —dijo analizando mi reacción. Yo no sabía nada de la fiesta, pero pensándolo bien, Peter nunca me advertía de ellas—
Lali:Puedo dormir con el ruido. Me he acostumbrado —eso era mentira. No me dormiría hasta que la última persona pisoteara la escalera—
Agus:¿Y si voy? ¿Podrías pasar un rato conmigo antes de que te acuestes?
Agus era determinado. Le daba eso. Iba a decirle que no cuando me di cuenta de que Peter se estaría revolcando esta noche con alguna chica. La llevaría a su cama y le haría sentir cosas que él nunca me permitiría sentir. Me hacía falta una distracción. Probablemente ya la tendría en su regazo para el momento en que llegue a casa.
Lali:Tú y Peter no parecen muy unidos. ¿Tal vez podríamos pasar el rato en la playa? No sé si es una buena idea que estés en la casa donde pueda verte
Agus:—asintió— De acuerdo. Estoy bien con eso. Pero tengo una pregunta, Lali -dijo mirándome con atención- ¿Por qué es esto? Hasta la otra noche en su casa, Peter y yo hemos sido amigos. Hemos crecido juntos. Los mismos círculos. Nunca he tenido ni un problema con él. ¿Qué lo enoja? ¿Hay algo entre ustedes dos?
¿Cómo respondía a eso? ¿No, porque él no quiere ser algo más y es más seguro para mi corazón si seguimos siendo amigos?
Lali:Somos amigos. Él es protector
Agus asintió lentamente, pero me di cuenta de que no me creyó.
Agus:No me importa la competencia. Me gusta saber a lo que me enfrento
No estaba en contra de nada, porque todo lo que él y yo siempre seríamos era amigos. No me buscaba a un hombre en su grupo.
Lali:No lo soy y nunca seré parte de tu gente. No pretendo salir seriamente con nadie que sea parte de tu círculo de élite
No esperé que discutiese. En su lugar, caminé alrededor de él y salí por la perta. Tenía que llegar a casa antes de que la fiesta se pusiera demasiado salvaje.
No quería ver a Peter envuelto con alguna chica.
***
No era una fiesta descontrolada. Era sólo una veintena de personas. Pasé junto a varios de ellos en mi camino a la despensa. Un par de ellos se encontraban en la cocina preparando bebidas y les sonreí antes de entrar en la despensa y luego a mi trastienda.
Si sus amigos no sabían que dormía debajo de las escaleras, lo sabían ahora.
Cambié mi uniforme y saqué in vestido azul hielo para ponerme. Mis pies dolían por caminar todo el día, así que iba descalza. Metí mi maleta de nuevo bajo las escaleras y entré en la despensa para estar cara a cara con Peter. Estaba apoyado contra la puerta que daba a la cocina con los brazos cruzados sobre su pecho y el ceño fruncido en su rostro.
Lali:¿Peter? ¿Pasa algo? —le pregunté cuando no dijo nada—
Peter:Agus está aquí —respondió—
Lali:Que yo sepa él es amigo tuyo
Peter:—sacudió la cabeza y sus ojos rápidamente escanearon mi cuerpo— No está aquí por mí. Vino por alguien más
Crucé los brazos por debajo de mis pechos y tome la misma postura defensiva.
Lali:Tal vez sí. ¿Tienes un problema con que sus amigos estén interesados en mí?
Peter:Él no es lo suficientemente bueno. Es un triste imbécil comemierda. No debería llegar a tocarte —dijo en un tono enojado—
Tal vez era cierto. Lo dudaba, pero tal vez tenía razón. No importaba. Yo no iba a dejar que Agus me tocase. Su cercanía no hacía mi estómago dar volteretas y sentir un dolor entre mis piernas.
Lali:No estoy interesada en Agus de esa manera. Él es mi jefe y, posiblemente, un amigo. Eso es todo
Peter pasó la mano por su cabeza y el anillo de plata sobre su pulgar me llamó la atención. No lo había visto usarlo antes. ¿Quién se lo había dado?
Lali:No puedo dormir mientras la gente está subiendo y bajando las escaleras. Me mantiene despierta. En lugar de sentarme en mi habitación sola, preguntándome con quién estás arriba follando esta noche, pensé en hablar con Agus en la playa. charlar con alguien. Necesito amigos.
Peter:—se sobresaltó como si lo hubiera golpeado— No te quiero afuera con Agus
Lali:—esto ya me parecía ridículo— Bueno, tal vez yo no quiero que folles a una chica , pero lo harás
Peter se apartó de la puerta y se acercó a mí, acompañándome a mi pequeña habitación hasta que los dos estuvimos dentro. un centímetro más y me caería en la cama.
Peter:No quiero follar a nadie esta noche —hizo una pausa y luego sonrió— Eso no es exactamente cierto. Permíteme aclarar, no quiero follar a nadie fuera de esta habitación. Quédate aquí y habla conmigo. Charlemos. Dije que podíamos ser amigos. No necesitas a Agus como amigo
Puse mis manos sobre su pecho para empujarlo hacia atrás, peor no pude hacerlo una vez que tuve mis manos sobre él.
Lali:Nunca me hablas. Hago la pregunta equivocada y te vas sin decir palabra
Peter:—negó con la cabeza— Ahora no. Somos amigos. Responderé y no me iré. Sólo por favor, quédate aquí conmigo
Miré al rectángulo pequeño que apenas tenía espacio para mi cama
Lali:No hay mucho espacio aquí —dije mirando hacia él y obligando a mis manos permanecer planas en su pecho y no cerrarlas en su ajustada camisa y tirarlo más cerca—
Peter:Podemos sentarnos en la cama. No vamos a tocarnos. Sólo hablar. Como amigos —me aseguró—
Dejé escapar un suspiro y asentí. No iba a ser capaz de rechazarlo. Además, había tantas cosas que quería saber de él.
Me hundí en la cabecera de la cama y me eché hacia atrás. Crucé las piernas debajo de mí.
Lali:Entonces, vamos hablar —dije con una sonrisa—
Peter se sentó sobre la cama y se apoyó contra la pared. Una risa profunda salía de su pecho y miré como una verdadera sonrisa estrellaba en su rostro.
Peter:No puedo creer que le supliqué a una mujer para que se sentase y hablase conmigo
Con toda honestidad, yo tampoco.
Lali:¿De que vamos hablar? —pregunté deseando que empezara hablar. No quería que se sintiera como si esto fuera la Inquisición española. Tenía tantas preguntas en mi cabeza que podía abrumarlo con mi curiosidad—
Peter:¿Qué te parece sobre cómo diablos sigues siendo virgen a los diecinueve? —dijo, volviendo sus ojos verdes hacia mi—
Nunca le había dicho que era virgen. Me llamó inocente la otra noche. ¿Era tan obvio?
Lali:¿Quién dijo que soy virgen? —pregunté en el tono más molesto que pude reunir—
Peter:—sonrió— Conozco una virgen cuando beso a una
Yo ni siquiera quería discutir sobre eso. Sólo haría el hecho de que era virgen aún más evidente.
Lali:Estaba enamorada. Su nombre es Simón. Fue mi primer novio, mi primer beso, mi primer más allá de besos, aunque suene aburrido. Me dijo que me amaba y afirmó que era la única para él. Entonces, mi mama se enfermó. Ya no tenía tiempo para ir a citas y pasar tiempo con Simón los fines de semana. Él necesitaba salir. Necesitaba libertad para tener ese tipo de relación de otra persona. Por lo tanto, lo dejé ir. Después de Simón no tuve tiempo para salir con nadie más.
Peter:—frunció el ceño— ¿No se quedó contigo cuando tu mamá estaba enferma?
No me gustaba esta conversación. Si alguien señalaba lo que ya sabía, sería difícil no tener sentimientos de ira por Simón. Le había perdonado hace mucho tiempo. Lo acepté. No necesitaba que la amargura hacia él se deslizase dentro de mí en este momento. ¿De qué serviría?
Lali:Éramos jóvenes. Él no me amaba. Sólo pensó que lo hacía. Tan simple como eso
Peter:—suspiró— Todavía eres joven
No estaba segura de que me gustara el tono en su voz cuando dijo eso.
Lali:Tengo diecinueve, Peter. He cuidado de mi madre durante tres años y la enterré sin la ayuda de mi padre. Confía en mí, me siento de cuarenta la mayor parte del tiempo
Peter:—extendió su mano sobre la cama y cubrió la mía con la suya— No deberías haber tenido que hacerlo sola
No, no debería pero no tuve ninguna otra opción. Amaba a mi mamá. Ella se merecía mucho más de que tuvo. La única cosa que aliviaba el dolor era recordarme que mamá y Ana estaban juntas ahora. Se tenían la una a la otra. Ya no quería hablar de mi historia. Quería saber algo acerca de Peter.
Lali:¿Tienes un trabajo? —le pregunté—
Peter:—rió entre dientes y me apretó la mano, pero no la soltó— ¿Crees que todo el mundo debe tener un trabajo una vez que acaba la universidad?
Me encogí de hombros. Siempre había pensando que la gente trabaja en algo. Tenía que tener algún propósito. Incluso si no necesitaba dinero.
Peter:Cuando me gradué de la universidad, tenía suficiente dinero en el banco para vivir el resto de mi vida sin tener que trabajar, gracias a mi papá —miró hacia mí con esos sexys ojos enmarcados por sus abundantes pestañas negras— Después de unas semanas de no hacer nada además de salir de fiesta, me di cuenta que tenía una vida. Así que empecé a jugar con la bolsa de valores. Resulta que soy jodidamente bueno en eso. Los números siempre fueron lo mío. También dono apoyo financiero para Hábitat para la Humanidad. Un par de meses al año soy un trabajador de construcción y voy a dar una mano en el sitio. En el verano me despego de todo lo que puedo, vengo aquí y me relajo
No me esperaba eso.
Peter:La sorpresa en tu cara es un poco insultante —dijo con burla en voz—
Lali:Siemplemente no me esperaba esa respuesta —le contesté con sinceridad—
Peter se encogió de hombros y movió su mano a su lado de la cama. Quería tomar su mano y agarrarla y aferrarme a ella, pero no lo hice. Él ya había terminado de tocarme.
Lali:¿Cuántos años tienes? —le pregunté—
Peter:—sonrió— Demasiado viejo para estar en esta habitación contigo y demasiado malditamente viejo para los pensamientos que tengo de ti
Estaba en sus veinte años. Tenía que estarlo. No se veía mayor que eso.
Lali:Te recuerdo que tengo diecinueve. Voy a tener veinte en seis meses. No soy un bebé
Peter:No, dulce Lali, definitivamente no eres un bebé. Tengo veinticuatro años. Mi vida no ha sido normal y por eso tengo algo de seria y jodida mierda. Ya te he dicho que hay cosas que no sabes. Dejarme tocarte sería un error
Era sólo cinco años mayor que yo. Eso no era tan malo. Donaba dinero a Hábitat para la Humanidad e incluso trabajaba en el sitio. ¿Qué tan malo podía ser?
Tenía un corazón. Me había dejado vivir aquí cuando lo que más había querido era enviarme en un paquete.
Lali:Creo que te subestimas. Lo que veo en ti es especial
Peter:—apretó sus labios con fuerza y sacudió la cabeza— No ves el verdadero yo. No sabes todo lo que he hecho
Lali:Tal vez —le contesté, inclinándome hacia adelante— Pero lo poco que he visto no es del todo malo. Estoy empezando a pensar que podría ser una capa más en ti
Peter alzó sus ojos para encontrarse con los míos. Quería acurrucarme e su regazo y mirar a esos ojos durante horas. Abrió la boca para decir algo, luego la cerró... pero no antes de que viera la plata en su boca.
Saqué mis rodillas debajo de mí y me acerqué más a él.
Lali:¿Qué tienes en tu boca? —pregunté, estudiando sus labios y esperando que los abriera de nuevo—
Peter abrió su boca y lentamente sacó la lengua. Era atravesado por una barra de plata.
Lali:¿Te duele? —pregunté estudiando su lengua de cerca. Nunca antes había visto a alguien con un piercing en la lengua—
Peter:—metió la lengua en su boca y sonrió— No
Me acordé de los tatuajes en su espalda la noche en que había estado teniendo sexo con la otra chica.
Lali:¿Qué son los tatuajes en tu espalda?
Peter:Un águila en la espalda inferior, con sus alas extendidas y el emblema de Demon Slaker. Cuando tenía diecisiete mi padre me llevó a un concierto en Los Ángeles y después me llevó a conseguir mi primer tatuaje. Quería su banda marcada en mi cuerpo. Cada miembro de Demon Slaker tiene uno en el mismo lugar exacto. Justo detrás de su hombro izquierdo. Papá estaba muy drogado esa noche, pero aún así es un recuerdo muy bueno. No tuve la oportunidad de pasar mucho tiempo con él mientra crecía. Pero cada vez que lo veía, añadía otro tatuaje o piercign a mi cuerpo
¿Tenía mas piercing? Estudié su rostro y luego dejé que mis ojos se posaran en su pecho. Una risita me sorprendió y me di cuenta de que había sido pillada mirándolo fijamente.
Peter:No tengo perforaciones allí, dulce Lali. Los otros están en mi oídos. Puse un fin a los piercing y tatuajes cuando cumplí diecinueve
Su papá estaba cubierto de tatuajes y piercings al igual que el resto de la banda Demon Slaker. ¿Fue algo que Peter no había querido hacer? ¿Su padre lo había obligado?
Peter:¿Qué dije de fruncir el ceño? —preguntó deslizando un dedo debajo de mi barbilla e inclinando mi cabeza hacia arriba para que pudiera mirarlo—
Ciertamente, no quería responder eso. Estaba disfrutando de nuestro tiempo juntos. Sabía que si profundizaba demasiado, pronto lo haría irse.
Lali:Cuando me besaste anoche no sentí la cosita con barra de plata
Peter:—bajó su párpados y se inclinó hacia delante— Porque no lo llevaba puesto
Él lo tenía ahora.
Lali:¿Cuando tú, uh, besas a alguien con eso dentro se puede sentir?
Peter:—aspiró fuerte y su boca se acercó aún más a la mía— Lali, dime que me vaya. Por favor
Si estaba a punto de darme un beso, entonces no le diría nada por el estilo. Lo quería aquí. También quería besarlo con esa cosa en la boca.
Peter:Lo habrías sentido. En cualquier parte que quiera besarte, lo sentirías. Y te gustaría —me susurró al oído antes de presionar un beso en el hombro y tomar una respiración profunda. ¿Me estaba oliendo?—
Lali:¿Estás...? ¿Vas a besarme otra vez? —pregunté sin aliento cuando presionó su nariz en mi cuello e inhaló—
Peter:Quiero. Quiero tan jodidamente mal, pero estoy tratando de ser bueno —murmuró contra mi piel—
Lali:¿Podrías no ser bueno para solo un beso? ¿Por favor? —pregunté arrastrándome más cerca de él. Me gustaría estar en su regazo pronto—
Peter:Duelce Lali, tan increíblemente dulce —dijo mientras sus labios tocaban la curva de mi cuello y mi hombro. Si seguí con esto iba a comenzar a mendigar—
Su lengua salió y dio un golpe rápido en la suave piel de mi cuello, luego dejó besos a lo largo de mi mandíbula hasta que su boca se cernía sobre la mía.
Comencé a rogar de nuevo, pero presionó un suave beso en mis labios y me detuvo. Luego se retiró, pero sólo un centímetro. Su aliento cálido bañando mis labios.
Peter:Lali, no soy un tipo romántico. yo no beso y abrazo. Solo doy sexo. Te mereces a alguien que te bese y te abrace. No yo. No estoy hecho para eso, nena. No eres para alguien como yo. Nunca me he negado algo que quiero. Pero eres demasiado dulce. Esta vez tengo que decirme a mí mismo que no
A medida que sus palabras se hundían en mí, gemí por el erótico sonido de las traviesas palabras saliendo de su lengua. No fue hasta que se puso de pie y agarró el pomo de la puerta que me di cuenta que de iba alejarse de mí. Una vez más. Dejándome así.
Peter:No puedo hablar más. No esta noche. No aquí contigo, a solas —la tristeza en su tono hizo que mi corazón doliese un poco. Luego se marchó y cerró la puerta tras él—
Me recosté contra la cabecera de la cama gemí de frustración. ¿Por qué lo había dejado entrar? Este juego de caliente y frío que jugaba estaba fuera de mi alcance. Me pregunté a dónde iría él ahora. Había un montón de mujeres por ahí que podría besar. Con las que no tenía problemas en besar si suplicaban.
El pisoteo de la gente subiendo las escaleras repiqueteaba por encima de mi cabeza. No conseguiría dormir por un rato. No quería quedarme aquí y Agus me esperaba. No había ninguna razón para ponerme de pie. No me sentía de humor para hablar con él, pero al menos podía decirle que no estaba para una charla en la playa.
Entré a la cocina. La espalda de Gas daba hacia mí y tenia una chica pegada a la barra. Sus manos se enredaban en los rizos castaños silvestres.
Parecían muy absortos. Tranquilamente, salí por la puerta de atrás esperando no estar en el camino de cualquier otra sesión de ligues.
Xxx:No pensé que te presentarías —dijo la voz de Agus desde la oscuridad—
Me giré para verlo apoyado en la barandilla, mirándome. Me sentía culpable por no haber venido aquí primero y hacerle saber que no iba a reunirme con él. No tomaba decisiones sabias cuando de Peter se trataba.
Lali:Lo siento. Me desvié —no quería explicar—
Agus:Vi a Peter salir del pequeño agujero en el que te tiene ahí atrás —respondió—
Me mordí el labio y asentí. Yo era un fracaso. Bien podría confesar.
Agus:No se quedó mucho tiempo. ¿Fue una visita amistosa o te estaba corriendo?
Fue... fue una visita agradable. Hablamos. Hasta le pedí que me besara nuevamente y él decidió huir. Había disfrutado de su compañía.
Lali:Sólo una charla amistosa —le expliqué—
Agus dejó escapar una risa dura y negó con la cabeza.
Agus:¿Por qué no me lo creo?
Porque él era inteligente. Me encogí de hombros.
Agus:¿Lista para nuestro paseo a la playa?
Lali:—negué— No. Estoy cansada. Vine aquí a respirar un poco de aire fresco y esperaba encontrarte para explicártelo
Agus:—me dio una sonrisa decepcionada y se apartó de la barandilla— Bueno, está bien entonces. No voy a rogarte
Lali:No esperaba que lo hicieras —contesté—
Caminó hacia la puerta y esperé hasta que estuvo en el interior antes de exhalar un suspiro de alivio. Eso no había sido tan malo. Tal vez ahora retrocedería un poco. Hasta que entendiera qué hacer con esta atracción que sentía por Peter no necesitaba a nadie que me confundiera más.
Unos minutos después di media vuelta y lo seguí al interior. Gas ya no estaba en el bar con la chica. Habían ido a un lugar más aislado, al parecer. Me dirigí hacia la puerta de la despensa cuando Peter entró en la cocina seguido de una morena riendo. Estaba colgada de su brazo y actuando como si no pudiera caminar correctamente. O bien era el alcohol o los tacones de diez centímetros le causaron ampollas a sus pies.
Xxx:Pero tú lo dijiste —arrastró las palabras y besó el brazo del que se aferraba. Sí que estaba ebria—
Los ojos de Peter se encontraron con los míos. Él iba a besarla esta noche.
Ella ni siquiera tendría que rogarle. Ella también sabía a cerveza. ¿Era ese su estilo?
Xxx:Me quitaré las bragas aquí mismo, si quieres —dijo ella, ni siquiera notó que no estaban solos—
Peter:Paula: ya he dicho que no. No me interesa —contestó sin apartar la mirada de mí. La estaba rechazando. y quería que yo lo supiera—
Paula:Será travieso —dijo en voz alta y luego se echó otro ataque de risa—
Peter:No, sería irritante. Estás borracha y tu cacareo me está dando un dolor de cabeza —respondió. Sus ojos aún no había dejado los míos—
Aparté mis ojos de él y me dirigí hacia la puerta de la despensa cuando finalmente Paula me notó.
Paula:Oye, esa chica va a robar tu comida —susurró en voz alta—
Mi cara enrojeció. Maldita sea. ¿Por qué avergonzarme? Era una estúpida.
Ella estaba borracha hasta el trasero. ¿A quién le importaba lo que pensaba?
Peter:Vive aquí, puede tomar lo que quiera —respondió Peter—
Paula:¿Vive aquí? —preguntó—
Peter no dijo nada más. Le fruncí el ceño y decidí que el único testigo no recordaría esto en la mañana.
Lali:No dejes que te mienta. Soy la invitada no bienvenida viviendo bajo sus escaleras. He querido un par de cosas y él sigue diciéndome que no.
No esperé su respuesta. Abrí la puerta y entré. Un punto para mí.
Aquí tieneen chiicaas!! espero que les haya gustado el capitulo.. besos
PD:Paula es Luna la de Casi Angeles.
Lali:No hay mucho espacio aquí —dije mirando hacia él y obligando a mis manos permanecer planas en su pecho y no cerrarlas en su ajustada camisa y tirarlo más cerca—
Peter:Podemos sentarnos en la cama. No vamos a tocarnos. Sólo hablar. Como amigos —me aseguró—
Dejé escapar un suspiro y asentí. No iba a ser capaz de rechazarlo. Además, había tantas cosas que quería saber de él.
Me hundí en la cabecera de la cama y me eché hacia atrás. Crucé las piernas debajo de mí.
Lali:Entonces, vamos hablar —dije con una sonrisa—
Peter se sentó sobre la cama y se apoyó contra la pared. Una risa profunda salía de su pecho y miré como una verdadera sonrisa estrellaba en su rostro.
Peter:No puedo creer que le supliqué a una mujer para que se sentase y hablase conmigo
Con toda honestidad, yo tampoco.
Lali:¿De que vamos hablar? —pregunté deseando que empezara hablar. No quería que se sintiera como si esto fuera la Inquisición española. Tenía tantas preguntas en mi cabeza que podía abrumarlo con mi curiosidad—
Peter:¿Qué te parece sobre cómo diablos sigues siendo virgen a los diecinueve? —dijo, volviendo sus ojos verdes hacia mi—
Nunca le había dicho que era virgen. Me llamó inocente la otra noche. ¿Era tan obvio?
Lali:¿Quién dijo que soy virgen? —pregunté en el tono más molesto que pude reunir—
Peter:—sonrió— Conozco una virgen cuando beso a una
Yo ni siquiera quería discutir sobre eso. Sólo haría el hecho de que era virgen aún más evidente.
Lali:Estaba enamorada. Su nombre es Simón. Fue mi primer novio, mi primer beso, mi primer más allá de besos, aunque suene aburrido. Me dijo que me amaba y afirmó que era la única para él. Entonces, mi mama se enfermó. Ya no tenía tiempo para ir a citas y pasar tiempo con Simón los fines de semana. Él necesitaba salir. Necesitaba libertad para tener ese tipo de relación de otra persona. Por lo tanto, lo dejé ir. Después de Simón no tuve tiempo para salir con nadie más.
Peter:—frunció el ceño— ¿No se quedó contigo cuando tu mamá estaba enferma?
No me gustaba esta conversación. Si alguien señalaba lo que ya sabía, sería difícil no tener sentimientos de ira por Simón. Le había perdonado hace mucho tiempo. Lo acepté. No necesitaba que la amargura hacia él se deslizase dentro de mí en este momento. ¿De qué serviría?
Lali:Éramos jóvenes. Él no me amaba. Sólo pensó que lo hacía. Tan simple como eso
Peter:—suspiró— Todavía eres joven
No estaba segura de que me gustara el tono en su voz cuando dijo eso.
Lali:Tengo diecinueve, Peter. He cuidado de mi madre durante tres años y la enterré sin la ayuda de mi padre. Confía en mí, me siento de cuarenta la mayor parte del tiempo
Peter:—extendió su mano sobre la cama y cubrió la mía con la suya— No deberías haber tenido que hacerlo sola
No, no debería pero no tuve ninguna otra opción. Amaba a mi mamá. Ella se merecía mucho más de que tuvo. La única cosa que aliviaba el dolor era recordarme que mamá y Ana estaban juntas ahora. Se tenían la una a la otra. Ya no quería hablar de mi historia. Quería saber algo acerca de Peter.
Lali:¿Tienes un trabajo? —le pregunté—
Peter:—rió entre dientes y me apretó la mano, pero no la soltó— ¿Crees que todo el mundo debe tener un trabajo una vez que acaba la universidad?
Me encogí de hombros. Siempre había pensando que la gente trabaja en algo. Tenía que tener algún propósito. Incluso si no necesitaba dinero.
Peter:Cuando me gradué de la universidad, tenía suficiente dinero en el banco para vivir el resto de mi vida sin tener que trabajar, gracias a mi papá —miró hacia mí con esos sexys ojos enmarcados por sus abundantes pestañas negras— Después de unas semanas de no hacer nada además de salir de fiesta, me di cuenta que tenía una vida. Así que empecé a jugar con la bolsa de valores. Resulta que soy jodidamente bueno en eso. Los números siempre fueron lo mío. También dono apoyo financiero para Hábitat para la Humanidad. Un par de meses al año soy un trabajador de construcción y voy a dar una mano en el sitio. En el verano me despego de todo lo que puedo, vengo aquí y me relajo
No me esperaba eso.
Peter:La sorpresa en tu cara es un poco insultante —dijo con burla en voz—
Lali:Siemplemente no me esperaba esa respuesta —le contesté con sinceridad—
Peter se encogió de hombros y movió su mano a su lado de la cama. Quería tomar su mano y agarrarla y aferrarme a ella, pero no lo hice. Él ya había terminado de tocarme.
Lali:¿Cuántos años tienes? —le pregunté—
Peter:—sonrió— Demasiado viejo para estar en esta habitación contigo y demasiado malditamente viejo para los pensamientos que tengo de ti
Estaba en sus veinte años. Tenía que estarlo. No se veía mayor que eso.
Lali:Te recuerdo que tengo diecinueve. Voy a tener veinte en seis meses. No soy un bebé
Peter:No, dulce Lali, definitivamente no eres un bebé. Tengo veinticuatro años. Mi vida no ha sido normal y por eso tengo algo de seria y jodida mierda. Ya te he dicho que hay cosas que no sabes. Dejarme tocarte sería un error
Era sólo cinco años mayor que yo. Eso no era tan malo. Donaba dinero a Hábitat para la Humanidad e incluso trabajaba en el sitio. ¿Qué tan malo podía ser?
Tenía un corazón. Me había dejado vivir aquí cuando lo que más había querido era enviarme en un paquete.
Lali:Creo que te subestimas. Lo que veo en ti es especial
Peter:—apretó sus labios con fuerza y sacudió la cabeza— No ves el verdadero yo. No sabes todo lo que he hecho
Lali:Tal vez —le contesté, inclinándome hacia adelante— Pero lo poco que he visto no es del todo malo. Estoy empezando a pensar que podría ser una capa más en ti
Peter alzó sus ojos para encontrarse con los míos. Quería acurrucarme e su regazo y mirar a esos ojos durante horas. Abrió la boca para decir algo, luego la cerró... pero no antes de que viera la plata en su boca.
Saqué mis rodillas debajo de mí y me acerqué más a él.
Lali:¿Qué tienes en tu boca? —pregunté, estudiando sus labios y esperando que los abriera de nuevo—
Peter abrió su boca y lentamente sacó la lengua. Era atravesado por una barra de plata.
Lali:¿Te duele? —pregunté estudiando su lengua de cerca. Nunca antes había visto a alguien con un piercing en la lengua—
Peter:—metió la lengua en su boca y sonrió— No
Me acordé de los tatuajes en su espalda la noche en que había estado teniendo sexo con la otra chica.
Lali:¿Qué son los tatuajes en tu espalda?
Peter:Un águila en la espalda inferior, con sus alas extendidas y el emblema de Demon Slaker. Cuando tenía diecisiete mi padre me llevó a un concierto en Los Ángeles y después me llevó a conseguir mi primer tatuaje. Quería su banda marcada en mi cuerpo. Cada miembro de Demon Slaker tiene uno en el mismo lugar exacto. Justo detrás de su hombro izquierdo. Papá estaba muy drogado esa noche, pero aún así es un recuerdo muy bueno. No tuve la oportunidad de pasar mucho tiempo con él mientra crecía. Pero cada vez que lo veía, añadía otro tatuaje o piercign a mi cuerpo
¿Tenía mas piercing? Estudié su rostro y luego dejé que mis ojos se posaran en su pecho. Una risita me sorprendió y me di cuenta de que había sido pillada mirándolo fijamente.
Peter:No tengo perforaciones allí, dulce Lali. Los otros están en mi oídos. Puse un fin a los piercing y tatuajes cuando cumplí diecinueve
Su papá estaba cubierto de tatuajes y piercings al igual que el resto de la banda Demon Slaker. ¿Fue algo que Peter no había querido hacer? ¿Su padre lo había obligado?
Peter:¿Qué dije de fruncir el ceño? —preguntó deslizando un dedo debajo de mi barbilla e inclinando mi cabeza hacia arriba para que pudiera mirarlo—
Ciertamente, no quería responder eso. Estaba disfrutando de nuestro tiempo juntos. Sabía que si profundizaba demasiado, pronto lo haría irse.
Lali:Cuando me besaste anoche no sentí la cosita con barra de plata
Peter:—bajó su párpados y se inclinó hacia delante— Porque no lo llevaba puesto
Él lo tenía ahora.
Lali:¿Cuando tú, uh, besas a alguien con eso dentro se puede sentir?
Peter:—aspiró fuerte y su boca se acercó aún más a la mía— Lali, dime que me vaya. Por favor
Si estaba a punto de darme un beso, entonces no le diría nada por el estilo. Lo quería aquí. También quería besarlo con esa cosa en la boca.
Peter:Lo habrías sentido. En cualquier parte que quiera besarte, lo sentirías. Y te gustaría —me susurró al oído antes de presionar un beso en el hombro y tomar una respiración profunda. ¿Me estaba oliendo?—
Lali:¿Estás...? ¿Vas a besarme otra vez? —pregunté sin aliento cuando presionó su nariz en mi cuello e inhaló—
Peter:Quiero. Quiero tan jodidamente mal, pero estoy tratando de ser bueno —murmuró contra mi piel—
Lali:¿Podrías no ser bueno para solo un beso? ¿Por favor? —pregunté arrastrándome más cerca de él. Me gustaría estar en su regazo pronto—
Peter:Duelce Lali, tan increíblemente dulce —dijo mientras sus labios tocaban la curva de mi cuello y mi hombro. Si seguí con esto iba a comenzar a mendigar—
Su lengua salió y dio un golpe rápido en la suave piel de mi cuello, luego dejó besos a lo largo de mi mandíbula hasta que su boca se cernía sobre la mía.
Comencé a rogar de nuevo, pero presionó un suave beso en mis labios y me detuvo. Luego se retiró, pero sólo un centímetro. Su aliento cálido bañando mis labios.
Peter:Lali, no soy un tipo romántico. yo no beso y abrazo. Solo doy sexo. Te mereces a alguien que te bese y te abrace. No yo. No estoy hecho para eso, nena. No eres para alguien como yo. Nunca me he negado algo que quiero. Pero eres demasiado dulce. Esta vez tengo que decirme a mí mismo que no
A medida que sus palabras se hundían en mí, gemí por el erótico sonido de las traviesas palabras saliendo de su lengua. No fue hasta que se puso de pie y agarró el pomo de la puerta que me di cuenta que de iba alejarse de mí. Una vez más. Dejándome así.
Peter:No puedo hablar más. No esta noche. No aquí contigo, a solas —la tristeza en su tono hizo que mi corazón doliese un poco. Luego se marchó y cerró la puerta tras él—
Me recosté contra la cabecera de la cama gemí de frustración. ¿Por qué lo había dejado entrar? Este juego de caliente y frío que jugaba estaba fuera de mi alcance. Me pregunté a dónde iría él ahora. Había un montón de mujeres por ahí que podría besar. Con las que no tenía problemas en besar si suplicaban.
El pisoteo de la gente subiendo las escaleras repiqueteaba por encima de mi cabeza. No conseguiría dormir por un rato. No quería quedarme aquí y Agus me esperaba. No había ninguna razón para ponerme de pie. No me sentía de humor para hablar con él, pero al menos podía decirle que no estaba para una charla en la playa.
Entré a la cocina. La espalda de Gas daba hacia mí y tenia una chica pegada a la barra. Sus manos se enredaban en los rizos castaños silvestres.
Parecían muy absortos. Tranquilamente, salí por la puerta de atrás esperando no estar en el camino de cualquier otra sesión de ligues.
Xxx:No pensé que te presentarías —dijo la voz de Agus desde la oscuridad—
Me giré para verlo apoyado en la barandilla, mirándome. Me sentía culpable por no haber venido aquí primero y hacerle saber que no iba a reunirme con él. No tomaba decisiones sabias cuando de Peter se trataba.
Lali:Lo siento. Me desvié —no quería explicar—
Agus:Vi a Peter salir del pequeño agujero en el que te tiene ahí atrás —respondió—
Me mordí el labio y asentí. Yo era un fracaso. Bien podría confesar.
Agus:No se quedó mucho tiempo. ¿Fue una visita amistosa o te estaba corriendo?
Fue... fue una visita agradable. Hablamos. Hasta le pedí que me besara nuevamente y él decidió huir. Había disfrutado de su compañía.
Lali:Sólo una charla amistosa —le expliqué—
Agus dejó escapar una risa dura y negó con la cabeza.
Agus:¿Por qué no me lo creo?
Porque él era inteligente. Me encogí de hombros.
Agus:¿Lista para nuestro paseo a la playa?
Lali:—negué— No. Estoy cansada. Vine aquí a respirar un poco de aire fresco y esperaba encontrarte para explicártelo
Agus:—me dio una sonrisa decepcionada y se apartó de la barandilla— Bueno, está bien entonces. No voy a rogarte
Lali:No esperaba que lo hicieras —contesté—
Caminó hacia la puerta y esperé hasta que estuvo en el interior antes de exhalar un suspiro de alivio. Eso no había sido tan malo. Tal vez ahora retrocedería un poco. Hasta que entendiera qué hacer con esta atracción que sentía por Peter no necesitaba a nadie que me confundiera más.
Unos minutos después di media vuelta y lo seguí al interior. Gas ya no estaba en el bar con la chica. Habían ido a un lugar más aislado, al parecer. Me dirigí hacia la puerta de la despensa cuando Peter entró en la cocina seguido de una morena riendo. Estaba colgada de su brazo y actuando como si no pudiera caminar correctamente. O bien era el alcohol o los tacones de diez centímetros le causaron ampollas a sus pies.
Xxx:Pero tú lo dijiste —arrastró las palabras y besó el brazo del que se aferraba. Sí que estaba ebria—
Los ojos de Peter se encontraron con los míos. Él iba a besarla esta noche.
Ella ni siquiera tendría que rogarle. Ella también sabía a cerveza. ¿Era ese su estilo?
Xxx:Me quitaré las bragas aquí mismo, si quieres —dijo ella, ni siquiera notó que no estaban solos—
Peter:Paula: ya he dicho que no. No me interesa —contestó sin apartar la mirada de mí. La estaba rechazando. y quería que yo lo supiera—
Paula:Será travieso —dijo en voz alta y luego se echó otro ataque de risa—
Peter:No, sería irritante. Estás borracha y tu cacareo me está dando un dolor de cabeza —respondió. Sus ojos aún no había dejado los míos—
Aparté mis ojos de él y me dirigí hacia la puerta de la despensa cuando finalmente Paula me notó.
Paula:Oye, esa chica va a robar tu comida —susurró en voz alta—
Mi cara enrojeció. Maldita sea. ¿Por qué avergonzarme? Era una estúpida.
Ella estaba borracha hasta el trasero. ¿A quién le importaba lo que pensaba?
Peter:Vive aquí, puede tomar lo que quiera —respondió Peter—
Paula:¿Vive aquí? —preguntó—
Peter no dijo nada más. Le fruncí el ceño y decidí que el único testigo no recordaría esto en la mañana.
Lali:No dejes que te mienta. Soy la invitada no bienvenida viviendo bajo sus escaleras. He querido un par de cosas y él sigue diciéndome que no.
No esperé su respuesta. Abrí la puerta y entré. Un punto para mí.
Aquí tieneen chiicaas!! espero que les haya gustado el capitulo.. besos
PD:Paula es Luna la de Casi Angeles.
me encantoooo . .subi massssssssss
ResponderEliminarMASSSSSS
ResponderEliminarmas aveces peter es un hdp con cariño
ResponderEliminarawww dios cada vez mas complicado todo esto .....MASmasMAS.
ResponderEliminarufaaaa! peter estan idiota aveces! jajajajajaja mas! ♥
ResponderEliminarUhhh que complicados que son!! Peter es un tarado.. Re largo el capitulo, mejor jajjaja .. Espero el proximoo
ResponderEliminarME encnatooo!!
ResponderEliminarMAS BESOOS :D
Maaaaaas me encantaa!!
ResponderEliminarMassssssssss
ResponderEliminarMasss
ResponderEliminarPeter parece traumado .
ResponderEliminarAgus se retiro muy pacífico
Masssssss
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