21° AMANDOLO/A SIN SABERLO ❤

   CAPITULO 21

Cuenta Lali

Qué fastidio. Ni en mi propia casa me libro del tarado ese. Peter Lanzani resultó ser un gran dolor de cabeza.

Señor ¿Qué hice en otra vida para merecer esto?

Este pibe va a provocarme un coma o peor aún, un suicidio. ¿Qué mierda hacía en mi casa? ¿Acaso no se cansaba de ser mi vecino y verme en el colegio? No, ahora tenía que aparecerse por mi casa también.

Señor dame paciencia, porque si me das fuerza, no respondo.

Subí a mi habitación y decidí llamar a Cande. Estaba tan emocionada. Cande llegaría en dos días y yo no podía esperar más para ver a mí mejor amiga–prima.

Llamada Telefónica

Cande:Morcillaaa loocaaa –gritó desde el otro lado del celular y reí, era única–

Lali:Pataaas de teeeroo –le grité devuelta–

Cande:¿Cómo andas? –preguntó–

Lali:A pies y ¿vos? –contesté divertida y ella rió–

Cande:Qué tarada –reimos– Contestame dale

Lali:Yo ando bien ¿y vos? –pregunté–

Cande:Pues yo muy bien –contestó– ¡No puedo esperar más para verte! –Dios mio la voz de mi prima servía para vender pasteles–

Lali:Tengo tanto que contarte

Cande:Yo también amiga mía

Lali:Por cierto, tan pronto llegues al día siguiente ¡Tenemos joda!

Cande:¿Joda? –preguntó alegre– ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿A qué hora? ¿Habrán caños? –si no se callaba me iba a a volver loca–

Lali:Tranquila Cande, respira y contá hasta diez –la interrumpí riendo– Es una joda en un lago a las 18:00 pm

Cande:¡Jodaaaa! –gritó emocionada–

Lali:–rodé los ojos y reí– Mira que sos fiestera candela

Cande:Siiiiii –gritó cómo una nena cuando se entera que la llevan a Disneyland París–

Majo:¡Lali! –me llamaba desde el living–

Lali:Bueno Can, tengo que colgarte. Mi madre me llama

Cande:Dale –dijo desanimada– Bye morci

Lali:Chao flaqui –colgué la llamada–

Fin de la llamada telefónica

Bajé las escaleras y paré en seco al ver quién estaba sentado al lado de mi madre. Mi padre. Perdón, ex padre. Porque ya no lo consideraba como uno.

Al verlo, todos los malos recuerdos me llegaron de golpe. Mis ojos se cristalizaron al instante.

Lali:¿Qué haces aca? –pregunté mientras lo miraba fijamente. Debo decirles que si las miradas mataran, mi padre estaría en un ataúd–

Carlos:Necesito hablar con vos Lali

Lali:Yo no necesito hablar con vos –miré a mi madre y la señalé– ¿Y vos qué? ¿Ya lo perdonaste? –le pregunté–

Los ojos de mi madre estaban cristalizados, algunas lágrimas amenazaban con salir. Yo no soportaba ver a mí madre llorar y mucho menos por el imbécil de mi padre.

Carlos:Solo dejame hablar con vos princesa –me suplicó–

Lali:¡No me llemes princesa! –dije con lágrimas en mis ojos– ¿A qué venís? ¿A recordarme todo mi sufrimiento? ¿A acostarte con la madre de otra enemiga?

Carlos:Por favor, solo quiero despedirme

Lali:¿Despedirte? –pregunté algo confundida–

Carlos:Me voy –contestó– Con mi nueva familia –sentí como si un balde de agua fría hubiese caído sobre mí–

Lali:¿Nueva familia? –pregunté sorprendida–

Asintió con la cabeza.

Carlos:Luz está embarazada y me iré con ella y con Paula a Londres –quedé en shock al escuchar eso–

¡Será Hijo de...!

Lali:Osea que, ¿Te acostaste con ella y ahora le vas a dar una mejor vida en Londres? ¿A la mina que me causó noches sin dormir, debido a sus burlas junto con su madre y tu bastardo hijo que está por nacer? –pregunté molesta mientras más lágrimas caían por mis mejillas–

Mi paciencia se había agotado. Y mis nervios se estaban descontrolando.

Carlos:Lali yo...

Lali:¡Te odio! –lo inrerrumpí– ¡Te odio con toda mi alma! –grité aún más fuerte. Mi madre estaba llorando y mi padre quedó en shock al escuchar mis palabras– Eras mi héroe –hubo un profundo silencio en la sala. Obviamente mi padre no sabía cómo responder a eso–

Carlos:Lali, vos...

Lali:¡Quedate con tu nueva y maldita familia! Todos se burlan de mí y me abandonan. Que lo hagas vos, no va a ser una diferencia –salí del living y me dirigí a mi habitación–

Sentí los pasos de mi padre que me seguían. Cerré la puerta en su cara y me eché al suelo a llorar.

Carlos:¡Lali, abrí la puerta!

¿Acaso nadie puede entenderme? ¿Acaso nadie puede entender por todo lo que he pasado?

De repente todos los recuerdos vinieron de golpe.


Flash Back

Xxx:Ahí viene –dijo la palo de escoba de Paula– ¡Fea!  –gritó provocando que todos comenzaran a reírse de mí–

Intenté ignorar sus risas pero la verdad era que me dolían. Me dolían mucho sus comentarios. 

Continué caminando y llegué a mi casa. 

Xxx:Lali –dijo mi madre– Vení cariño, estamos en la cocina

Me dirigí a la cocina intentando contener mis lágrimas.

Xxx:¿Estás bien? –intento fallido de ocultar mi tristeza– ¿Hermosa que te pasa? –preguntó mi padre con cara de preocupación–

Lali:Nada, estoy bien –dije con la mirada en el suelo–

Majo:¿Te siguen molestando? –preguntó un toque molesta– Carlos, vas a tener que hablar con la madre de esa tal Paula

Lali:No es nada –contesté– Estoy cansada. Voy a mi habitación

Subí a mi habitación y recibí una llamada en mi celular, al mirar la pantalla sonreí como una idiota. 

Llamada telefónica

Lali:Pablo –contesté–

Pablo:¿Cómo está mi hermosa novia? –preguntó con su voz que por cierto me encantaba–

Lali:Bien –mentí– ¿Y vos?

Pablo:Yo estoy muy bien –contestó– Hoy te tengo una sorpresa hermosa

Lali:–sonreí– ¿Ah sí? ¿Qué es? –pregunté como si fuera una nena–

Pablo:Es una sorpresa, se supone que no te diga –dijo mientras reía. Como me encantaba su risa–

Lali:De acuerdo –dije haciendo un puchero, aunque sabía que no me estaba viendo–

Pablo:Apuesto a que en este momento estás haciendo un puchero ¿No? –me encantaba lo mucho que me conocía–

Lali:¿Qué comes que adivinas? –pregunté riendo–

Pablo:–soltó una carcajada– Te recojo a las ocho 

Lali:Dale 

Pablo:Te amo La

"La" era el apodo que me puso, era una abreviación de "Lali" 

Lali:Yo te amo más Pablo –dije mientras colgaba la llamada con una sonrisa en mi rostro–

Fin de la llamada telefónica

A las ocho me pasó a recoger a mi casa. ¡Estaba tan emocionada! Sí todo salía bien, hoy sería mi primera vez. Ya saben a lo que me refiero con mi primera vez ¿no? ¡Así es! Hoy perdería mi gran V con el chico que amo. 

Llegamos a su casa y me vendó los ojos. 

Pablo:Con cuidado –decía mientras me dirigía por su casa para que no tropezara–

Me quitó la venda de los ojos y los abrí cómo platos al ver eso tan hermoso. Estábamos en su habitación. La cama estaba llena de pétalos de rosas y había pequeñas velas por toda la habitación. Era hermoso.

Pablo:¿Te gusta? –preguntó con su hermosa sonrisa–

Asentí con  la cabeza emocionada.

Pablo agarró mi rostro con ambas manos y comenzó a besarme, era un beso suave y cálido. Le seguí el beso y éste poco a poco se intesificó más. No sé como pero luego de unos pocos minutos ya estaba sobre la cama con él sobre mí. Aún besándonos. Estaba nerviosa,muy nerviosa. ¿Y si lo hacía mal? ¿Y si no le gustaba? 

Pablo comenzó a subir mi casa hasta que la quitó por completo, luego bajó mis pantalones y los quitó. Despegó sus labios de los míos para observar mi cuerpo en ropa interior. Su rostro estaba concentrado, como si quisiera grabar mi cuerpo en su memoria. Luego sonrió y me miró a los ojos, juntó nuevamente sus labios con los míos. Comenzó a desabrochar mi sostén y a besar mi cuello. 

¡Esto es el cielo!

Pablo:Te amo –susurró mientras besaba mi cuello–

Besó nuevamente mis labios mientras bajaba mis pantalones.


                                  ***


¡Esta ha sido la mejor noche de mi vida! Y no estoy exagerando. Pablo me hizo sentir única. Me hizo sentir amada bajo sus brazos. 

Ahora mismo tenía mi cabeza recostada sobre su pecho. Él Estaba dormido y lucía completamente hermoso.

Su celular comenzó a sonar. Lo tomé en mis manos y vi que en la pantalla  decía el nombre de Nacho, su mejor amigo. Contesté la llamada, para que Pablo no se despertara. Iba a hablar pero al contestar la llamada, Nacho habló rápidamente.

Llamada Telefónica

Nacho:¡Pablo! –gritó– Amigo mío. ¿Ya lo lograste? ¿Te comiste ya a esa fea? –me quedé en silencio tratando de asimilar esta situación– Pendejo dime si gané la apuesta o no. ¿Ya te llevaste a Lali a la cama? 

Y justo ahí, mi mundo se desmoronó. 

Fin del Flash Back

Carlos:Está bien, como quieras –escuché los pasos de mi padre alejarse–

Me levanté del suelo y sequé mis lágrimas. Fui a mi escritorio y saqué un sacapuntas. Con mucha paciencia e ignorando los gritos de mi madre en la puerta, saqué las pequeñas navajas del sacapuntas.

Llámenme cobarde si quieren. Pero no puedo más con esto. Nadie me escucha. Nadie me comprende. Todos piensan que soy fea, todos me traicionan. Soy solo una maldita molestia. Fui una apuesta para el chico que amaba. Fui una burla para todos los de mi antiguo colegio. A mi padre no le importó tener una familia para acostarse con otra. Y ahora se iba con ella. 

Nunca seré feliz. No nací para ser feliz. 

Me encerré en mi baño y con la pequeña navaja me hice un profundo corte en mi muñeca. A ese corte siguió otro y otro. Al terminar me sentí mejor. Esto en cierta manera me ayudaba. Esta vez los cortes fueron más profundos. Sin embargo no estaba asustada. Quería irme ya de este maldito mundo. Ya era hora de terminar con esto.

Luego de unos minutos escuché los gritos de mi madre, pero estaba muy débil para contestar. Luego escuché que alguien tiró la puerta de mi cuarto.

Ya no me importaba nada. No tenía fuerzas, había perdido mucha sangre. Alcé la vista y me encontré con unos hermosos ojos verdes que me miraban horrorizados y a esto le siguió el grito de horror de mi madre. En ese mismo instante cerré mis ojos. No podía más.



¿Que les pareció? ¿Sufrirá consecuencias el hecho de que Lali haya vuelto a intantar quitarse la vida? Ya saben el por qué tanto dolor del pasado... si puedo subo otro más tarde, no he podido escribar por temas personales, desde q pueda les hago maraton. Besos ❤