38° POR NUEVOS COMIENZOS ❤

   CAPITULO 38   1/3

Cuenta Lali

Di un paso hacia atrás como si me hubieran dado un golpe. En realidad, sentía como si me hubieran dado un golpe, un golpe de esos que te deja sin respirar por unos segundos y se te nubla la vista.

Lali:¿Qué... qué? Mamá ¿De qué habla? -le pregunté-

Rogaba que me dijera que estaba mintiendo, rogaba que me dijera que esto era una estúpida broma de mal gusto.

Mi mamá me miró con los ojos empañados. Conocía esa mirada, me estaba pidiendo perdón con los ojos, era la misma mirada que tenía ayer, cuando la encontré llorando.

Lali:¿Se trata de lo que me dijiste ayer? Mamá ya te lo dije, soy feliz aca, con vos -mi voz sonaba desesperada, pero no me
importaba-

Majo:Lali, no quería decírtelo ahora -dijo con la voz quebrada- se suponía que Carlos iba a venir mañana, después de tu
cumpleaños...

Carlos:Quería pasar a saludarte -dijo dirigiéndose a mi- hace mucho que no nos vemos…

Lali:¿Lo decis en serio? -pregunté frunciendole el ceño- ¡¿Qué mierda te hace pensar que podes venir el día de mi
cumpleaños y decirme que hace mucho no nos vemos?! -grité- no somos dos viejos amigos que se han dejado de ver y hoy
se reencuentran

Carlos:Hija, sé que te debo explicaciones, también sé que...

Lali:Me llamo Mariana no hija, y ¿explicaciones de qué? Me importan una mierda tus explicaciones. Explicaciones le debes a la mujer que me crió y me mantuvo
desde que tengo uso de razón y me dio todo, incluso cuando su esposo nos abandonó

Carlos:Sé que estas enojada pero debes calmarte, es tu cumpleaños y…

Lali:Vaya, me sorprende que lo sepas. ¿Facebook te lo recordó? Ah, no -contesté negando con la cabeza- cierto que estás tan
desinteresado que ni en Facebook te molestaste en buscarme

Majo:Carlos, será mejor que te vayas

Lali:Ay no, mejor quedate y contanos un poco Carlos -dije irónica- ¿Cómo te la pasaste este último tiempo? ¿Y este último año? ¿Y estos últimos cinco que no fuiste capaz de venir a visitarme, llamarme, y ni siquiera mandarme un mensaje? -escupí las palabras como si me quemaran en la garganta- Dale contame, ¿valió la pena dejar a tu hija y a tu esposa por otra? ¿Valió la pena echar a perder todo lo que lograste? ¿Valió la puta pena saber… -comencé a decir pero me callé antes que dijera algo de lo que me pudiera arrepentir-

Mi padre me miraba fijamente sin decir nada, sabía que estaba incómodo pero no me importaba. Esperaba que por lo
menos, mis palabras le causaran un poco de dolor. Quería que sufriera igual que había sufrido yo el año que nos dejó, el
año que lloré todas las noches y mi madre tenía que quedarse desvelada conmigo para que me tranquilizara.

Carlos:Puede que esto no signifique nada para vos pero pensé en llamarte, pensé en venir a verte, y sé que pensar no es lo mismo que hacer, pero no sabes lo difícil que fue para mi dejarte atrás. Desde el día que crucé esta puerta que me arrepiento de
no haberte dicho adiós. Pensé que iba a ser más fácil ¿Sabes? Que iba a doler menos...

Lali:¡Deja de mentir! -dije con los dientes apretados- Todo ese sufrimiento se arreglaba con algo tan simple, como por ejemplo no dejarme de lado ¿Por qué me dejaste atrás? ¿No te acordas lo unidos que éramos? ¿No recordas las veces que íbamos a andar en bicicleta y a comprar golosinas para luego esconderlas para que mamá no nos retara? ¿No recordas las veces que
nos quedábamos hasta tardes viendo dos películas? Una de princesitas y otra de acción, una por mi y otra por vos. ¿No recordas las veces que cocinábamos tortas juntos y me dejabas decorarlas como yo quisiera? Me manchabas la nariz con chocolate y me decías que era una payasita

Carlos:Obvio que lo recuerdo Lali, no me he olvidado de nada. Y por lo mismo que decis vos fue por lo que decidí irme sin decir adiós. Éramos muy unidos, una despedida nos iba a destrozar

Lali:¡Vos me destrozaste! ¡No te despediste de mi porque sos un cobarde y no porque te dolía despedirte de mi!

Carlos:Cariño, podemos arreglar esto, ahora que vendrás a vivir conmigo…

Lali:¡No iré a vivir con vos! ¿Mamá por qué me haces esto? -le pregunté con los ojos cerrados-

Majo:Hija, sabes que no haría esto si no fuera sumamente necesario. Me despidieron en mi trabajo…

Lali:¿Qué? ¿Por qué?

Majo:Eso no es importante ahora, Lali. Pero necesito que vos también me ayudes en esto. No sabes el dolor que siento por
dejarte ir, pero es lo mejor para vos. Por lo menos hasta que encuentre otro trabajo, necesitas a alguien que te mantenga y
te de todo lo que necesites

Lali:¡Vos sos lo que necesito mamá! Voy a ayudarte a encontrar un trabajo, te lo prometo. Yo misma buscaré uno para mi, lo
que sea, no es tan difícil. Acabo de cumplir 17, muchas personas me tendrán en cuenta

Mi madre negó con la cabeza.

Majo:Sabes que no te dejaremos hacer eso

Lali:Mamá pero tengo a todos mis amigos aca. Peter…

Inconscientemente agarré el collar del ancla que me había regalado. Mi corazón dolía, literalmente dolía. Sentía una angustia en indescriptible, la presión que sentía en el pecho era abrumadora y tenía un nudo en la garganta que no podía quitar. No podía dejar atrás a todo lo que amaba. No podía.

¿Cómo iba a dejar a mis mejores amigos? ¿A Euge y a Gas? Ellos fueron los que siempre estuvieron a mi lado sin importar qué. Fueron los que me contuvieron el año que perdí a mi padre –porque lo había perdido, el padre que yo amaba no era el padre que tenía hoy en día– me habían sacado de mi estado de depresión y me habían enseñado a volver a hacer feliz. Su amistad significaba todo para mi ¿Cómo podía dejarlos atrás? A Alex y a Tincho que me era imposible imaginarme un día sin ellos haciéndome reír o sacándome una sonrisa. ¿Cómo iba a hacer para no extrañarlos?

Y Peter… Dios, Peter. Mi corazón se hundía cuando pensaba en él. Él era lo mejor que tenía, él era la persona que me
inspiraba cada día, él era todo lo que necesitaba siempre, él era todo lo que quería. Él era él. ¿Cómo iba a vivir sin mi Lanzani? ¿Cómo iba a vivir sin el único chico que me había enamorado y había logrado que quiera enamorarme?

Carlos:Podrás venir a verlos -me aseguró- no dejarás de perder contacto con ellos

Lali:Eso es mentira y lo sabes. Quiero quedarme aca con mis amigos, ir a mi instituto, vivir con mi madre...

Carlos:Te harás nuevos amigos allá, ya lo verás, todos te darán la bienvenida, el instituto es enorme. Y se que extrañarás vivir con tu madre, es un gran cambio pero te acostumbrarás a vivir conmigo

Lali:¡No quiero! ¡No quiero vivir con vos! ¡No lo haré! -le grité y subí las escaleras a toda velocidad para refugiarme en mi
pieza, con Peter-

Lo encontré sentado en mi cama, con los ojos cerrados, agarrándose la cabeza con las manos. Cuando me escuchó entrar,
alzó la cabeza y hubiese deseado que no lo hiciera.

Tenía los ojos rojos, como si hubiera llorado, tenía ojeras y estaba pálido. Estaba segura que había escuchado cada
palabra de le discusión.

Me estuve aguantando las lágrimas desde que había visto a mi padre en la puerta de mi casa pero cuando vi a Peter no
pude evitar romper a llorar. Él se levantó rápidamente y extendió los brazos para darme un fuerte abrazo.

Lali:Lo odio, lo odio -dije mientras lloraba en su pecho- ¿Por qué me tiene que hacer esto?

A pesar de que Peter me agarraba con fuerza y me acariciaba la espalda, su silencio me aterraba y necesitaba que dijera
algo.

Lali:Peter…

Peter:No quiero perderte -susurró en mi oído- ahora que te encontré no quiero perderte

Quería decirle que no iba a perderme, que no iba a ir a ninguna parte pero no podía mentirle, ni a él ni a mi misma.

Había perdido la cuenta de cuanto tiempo llevábamos así cuando él se alejó y me agarró la cara con sus manos.

Peter:Te juro que traté de hacer todo lo posible para que esto no pasara, le pedí a mi madre plata prestada pero Majo no la
quiso aceptar, hablé con tu papá, fui…

Lo miré confundida.

Lali:¿Vos…vos ya lo sabías?

Él me miró avergonzado y asintió.

Peter:Ayer a la noche vine a tu casa porque quería verte antes de que vinieran los demás, tu mamá me abrió la puerta, estaba
llorando y me contó que había perdido su trabajo y tu padre quería que vayas a vivir con él, fue allí cuando lo llamé, luego
de discutir con él le dije a Majo que le podíamos prestar plata, llamé a mi mamá y me dijo que si pero tu mamá no accedió a coger la plata, estaba desesperado, no sabía que hacer, fui a mi casa a calmarme porque no quería que me vieras así, estaba perdiendo la cabeza, me estaba volviendo loco y fue entonces cuando te escribí una carta. También trate de buscar laburos por
internet pero…

 Lali:Basta, por favor...

Necesitaba que parara, me hacía mal escucharlo. Ahora entendía por qué estaba tan intenso anoche cuando me despertó.

Lali:¿Los demás saben?

Peter:No, saben que me pasó algo y por eso te iba a venir a ver más tarde pero no saben el por qué

Lali:No se como haré para decirles -sollocé- no quiero decirles ahora mismo, ni siquiera comenzamos a festejar mi cumpleaños –negué con la cabeza- mi estúpido cumpleaños

Peter:Hey, hey -me dijo mientras se limpiaba una lágrima de la cara- es tu cumpleaños ¿si? Tenes que dejar de llorar y pasarla bien

Mientras lo decía me secó las lágrimas que caían por mis mejillas con sus dedos, luego se acercó para besarme las mejillas
mojadas y los labios.

Peter:No quiero pensar en perderte -continuó- es uno de mis peores miedos y me aterra que pueda llegar a pasar. Haré hasta
lo imposible para que te quedes ¿Lo sabes, no? Nadie te va a alejar de mi

Es gracioso como en ese momento sus palabras me dieron confianza y me aliviaron. Pero la verdad era que un chico de diecisiete años no podía hacer nada contra los deseos estrictos de mis padres. Esto no era como en las películas que el
novio va a buscar a su novia al aeropuerto rogándole que se quede y ella lo hace, solo por él. Yo no tenía ningún tipo de elección en esto y creo que en el fondo los dos lo sabíamos.


                                   ***


Contarle a mis amigos que me iba a mudar fue una de las cosas más difíciles que tuve que hacer en mi vida, además de dejar a Peter. Todos se quedaron helados ante la noticia y Euge fue la primera en comenzar a llorar. Sentía que estaba viviendo mi peor pesadilla, y estaba arrastrando a mis amigos con ella. Ellos trataron de ayudarme y buscar otras alternativas, hasta me ofrecieron sus propias casas.

Fue en ese momento cuando me di cuenta de lo ilusos que podíamos llegar a ser los adolescentes, aunque realmente
ilusos no era la palabra. Soñadores si lo era.

Al pasar los años me fui dando cuenta de cómo las personas dejan de creer y se conforman con su vida normal, le ponen
un límite a su vida y no se atreven a mirar más allá de ello. Recuerdo cuando un profesor le preguntó a Gastón que
quería hacer en su futuro, y él respondió que quería seguir jugando al rugby o ser cabtante y el profesor se rió tan fuerte que Euge tuvo que sostenerme para que no me levantara a golpearlo.

Eso era lo que más odiaba, las personas que porque no creían que fueran capaz de hacer lo que quisieran, tampoco creían que los demás podrían.

Hablé de ello con mi profesora de matemática cuando fui a buscar mis cosas al instituto ese día. No pensaba hablar con nadie ya que estaba segura de que si lo hacía me iba a largar a llorar luego de decir dos palabras, además pensaba que no tenía nadie con quien hablar. Me era muy doloroso hablar con mis amigos y con Peter, y lo que menos quería era hablar con mis padres pero, sorprendentemente, estaba equivocada.

Lali:Y lo peor de todo es que yo no puedo hacer nada para evitarlo -le dije a mi profesora entre sollozos- mis padres piensan que es lo mejor para mi, pero no es así. Lo mejor para mi son mis amigos, mi novio, mi madre, la vida que tengo aca. No quiero estar con mi padre, él no es el padre que yo recuerdo

Profesora:¿Estas segura de eso, Lali? ¿Por qué no le das una oportunidad? Entiendo que lo que hizo fue horrible, y yo misma
quiero ir a darle una patada en… -suspiró- pero si hay algo que me ha enseñado la vida es que las cosas pasan por algo, y tal vez este es tu momento para reconciliarte con tu papá. No querrás estar peleada con él por el resto de tu vida ¿O si?

Lali:Obvio que no, me encantaría reconciliarme con mi padre, con el padre que yo conocía y me crió, no el padre que me abandonó sin ni siquiera decir adiós. Se que dicen que las personas no cambian, que eventualmente muestran como son
en realidad. Eso es lo más estúpido que escuché en mi vida. Si hay algo de lo que estoy segura es que la persona que yo
amaba años atrás nunca me hubiese hecho lo que hizo después. Las personas si cambian, y mi padre cambió

Profesora:Estoy de acuerdo con vos, las personas cambian, tu propia vida cambia y lo estas viviendo ahora mismo. Sé que sentís que esto es el fin del mundo para vos, pero pronto verás que no es así

Lali:Ya se lo que dirá, Profesora Pardo. Siempre que se cierra una puerta se abre otra. Pero ¿Y si yo no estoy preparada para
cerrar esa puerta?

Profesora:Hay algo de lo que te olvidas Lali, vos tienes la llave de tu propia puerta, y podes abrirla cuando quieras


                               ***


Por la tarde armé la valija con Euge y Gas. También le dije a Alex y a Tincho que vinieran pero ellos dijeron que nos
merecíamos tener un tiempo a solas. Peter, por otro lado, prefirió no venir. No lo culpaba, sabía que para él era tan
doloroso como para mi, y también sabía que no iba a poder ocultar su dolor e iba a ser más difícil para los dos. Gastón y
Euge trataban de parecer fuertes por mi y se los agradecía porque no creía que pudiera soportar que ellos estuvieran mal en frente mío.

Euge:No quiero que vuelvas con una nueva mejor amiga ¿Entendido? -dijo mientras doblaba mi ropa-

Oh, también se aseguraban de hablar como si fuera a volver dentro de poco tiempo.

Gastón:Tampoco con otro mejor amigo -dijo frunciendo el ceño- no importa si es homosexual o heterosexual. Nada
de otros mejores amigos

Me reí. Jamás los cambiaría por nada a mis mejores amigos.

Lali:No voy a volver con ningún otro mejor amigo, nadie podría reemplazarlos, se los prometo

Euge:Y hablaremos todos los días -continuó dobalando mi ropa sin mirarme- él día que no me llames iré yo misma a buscarte

Lali:¿Me extrañaran? -pregunté mordiéndome el labio-

Gastón:Yo extrañaré ir en auto -dijo jodiendome- ¿China lo has pensado? ¡Ya no tenemos el Volvo de Lali! Tendremos que
levantarnos más temprano para llegar a tiempo al instituto

Le lancé una almohada a la cabeza con fuerza, pero lo atrapó antes de que pudiera tocarlo.

Gastón:Jugador de rugby ¿lo olvidas?

Euge se acercó a abrazarme.

Euge:Obvio que te extrañaremos, ni siquiera te has ido y ya te extraño. No sé como voy a sobrevivir sin mi mejor amiga
-dijo abrazándome con fuerza-

Gastón dejó la almohada e hizo lo mismo.

Gastón:Estaremos esperándote ¿Lo sabes no? Y cuando vuelvas va a ser todo exactamente como antes. Bueno, tal vez empiece el gimnasio y esté más musculoso pero sin contar eso, será todo igual que antes

Lali:Eso espero

Gastón:Hey, lo digo en serio -aseguró y negué con la cabeza deshaciéndome de sus abrazos-

Lali:Es solo que estoy asustada. Peter estaba tan desesperado, dijo que iba a hacer lo que sea para que me quedara pero los tres sabemos que eso no va a ser posible, mis padres ya me lo dejaron claro. ¿Qué va a pasar cuando se de cuenta que realmente me voy?

Euge:Va a ser difícil, le va a doler pero si tuvo esperanza para que te quedaras, va a tener esperanza para que vuelvas. Solo tiene que tener fé y todo saldrá bien

Asentí con la cabeza tratando de sonreír.

Euge:Bueno, podemos hacer un descanso
 Salgamos un rato, es tu cumpleaños y tenes que comer la rica torta que he preparado

Gastón:¿Qué he preparado? ¿Peeerdón? -preguntó comenzando la discusión- yo hice más que vos tu estúpido


                                  ***


Eran las once de la noche cuando Peter finalmente me llamó y me pidió que saliera de mi casa. Se suponía que me iba a venir a buscar a mi casa una hora atrás para ir a cenar pero no había aparecido y ya me estaba asustando.

Cuando salí de mi casa me encontré con Peter de espaldas, parado, tan quieto que parecía una estatua.

Lali:Peter ¿Qué...

Peter:No iba a venir -dijo interrumpiendome-

Mi corazón empezó a latir con tanta fuerza que estaba segura que Peter lo podía escuchar.

Lali:¿Por qué? -le pregunté sin saber si quería escuchar su respuesta o no-

Peter:Pensé que nunca iba a sentir este dolor de nuevo ¿sabes? -su voz era ronca, parecía que le costaba pronunciar cada
palabra que decía- Pensé que nunca iba a tener que pasar por el mismo sufrimiento de nuevo, era imposible que algo me
hiciera doler tanto como el accidente. Pero esto me esta matando. No puedo pasar de nuevo por esto, no otra vez

Lali:No tiene por qué ser así. Esto no es el fin del mundo -dije acordándome de lo que me había dicho mi profesora- solo
tenes que esperarme, voy a volver y…

Peter se dio la vuelta con brusquedad y me quedé sin respiración al verle la cara, tenía un ojo completamente morado y su
labio inferior estaba hinchado.

Lali:¡¿Qué mierda te pasó?! -pregunté acercándome a él-

Peter:No volverás Mariana, no lo entendes ¿no?

Su Mariana me había dolido muchísimo. Nada estaba bien en este momento.

Lali:¿De qué hablas?

Peter:No se que te dijeron tus papás, pero no tienen la más mínima intención de volver aca. Tu mamá está pensando en
vender la casa e irse a vivir cerca de la casa de tu papá, donde vivirás vos también

Lali:¿Qué? No, no, mi madre me lo hubiera dicho

Peter:¿Posta pensas eso? ¿De verdad pensas que te lo va a decir en tu cumpleaños?

Lali:Tiene que haber alguna otra forma...

Peter:No la hay, Lali! ¡No la hay!

Lali:¡¿Por qué te estas comportando así?! ¡Se que esto es difícil para vos! ¿Pero pensas que para mi no lo es? Estoy tratando de
tener fé, estoy tratando de encontrar una puta solución...

Peter:Ya lo he intentado, lo he intentado todo y... me rindo

Lali:¿Te rendis? -pregunté boquiabierta- ¿Me lo estas diciendo posta? ¿Vos? Vos que sos la persona que me ha enseñado a
tener esperanza, vos que me has enseñado a que se puede seguir adelante a pesar de toda la mierda que pueda llegar a
pasarte ¿Ahora me decis que te rendis?

Peter:¿Cómo queres que tenga esperanza si te estás alejando de mi? He perdido a mi hermana, he perdido ala que fue mi mejor amigo, y ahora te estoy perdiendo a vos y esa es la puta realidad. No, no voy a tener fé, no voy a tener esperanza ni ninguna otra maldita cosa que se le parezca porque yo no sirvo para esto, todo lo que más amo en el mundo se muere o se va y ya no lo
soporto. No puedo esperarte, sabiendo que cada día estás más lejos de mi, y tal vez no vuelvas nunca

Lali:¿Sabes? Nunca pensé que me romperías el corazón porque nunca pensé que me enamoraría de vos ¿Es irónico, no? Las dos cosas terminaron pasando

Peter cerró los ojos con fuerza.

Peter:¿Vos sabes lo mal que me hace oírte decir eso? No tenes una mínima idea de lo difícil que es para mi decirte esto pero los
dos vamos a seguir sufriendo si no cerramos este capítulo ahora. No puedo soportar la idea de tenerte tan lejos, yo
esperándote y vos sin poder seguir con tu vida. Te amo más que a nada en el mundo por eso te estoy dejando ir

Negué con la cabeza sin poder mirarlo.

Lali:No, vos no me estás dejando ir, estás dándote por vencido con nosotros

Di la vuelta y volví a entrar a mi casa antes de que pudiera arrpentirme, una vez que cerré de un portazo la puerta, subí corriendo hasta mi pieza y cerré la puerta de mi cuarto con el pestillo de seguridad.

El nudo en mi garganta era insoportable, pero nada se comparaba con la angustia que sentía en el corazón. Todo mi
cumpleaños había sido un desequilibrio emocional para mi y ya no lo soportaba más. Estaba harta de llorar y estaba harta de fingir que las cosas iban a estar bien, porque nada nada estaba yendo bien en mi vida. Me separaba de mis amigos, mi novio había roto conmigo e iba a vivir con prácticamente un extraño para mi.

Saqué la valija de mi cama y fruncí el ceño al ver un sobre rosa debajo. Era la carta que Peter me había escrito. 

Al principió dudé si abrirla o no, no estaba segura que pudiera soportar más palabras hirientes, pero tenía que leerla. Me acosté en mi cama y tras un larga respiración, abrí la carta.


Querida Sanshita:

Primero que nada perdona mi letra, mis manos están temblando y mi pulso no es bueno. Al principio pensé en hacerte
una carta de despedida pero odio la puta idea de que tengo que despedirme de vos, no quiero hacerlo y no lo haré. Quiero que cuando en unos años leas esta carta recordes a la persona que más te amó de la manera más pura que alguien puede amar. El primer día que te vi –el día que estabas en pedo– recuerdo haber pensado que estabas muy, muy, fuera de mi alcance y hasta el día de hoy no entiendo como logré que te enamoraras de alguien como yo. El día que me rayaste la moto recuerdo que me senté en tu auto a esperarte y cuando me miraste con los ojos como platos pensé que no me importaba una mierda la rayadura, necesitaba conocerte. Tincho pensó que te quería como una conquista más ya que hacía mucho que no estaba con ninguna mina y me prohibió jugar con vos. Yo le juré que no iba a hacerlo. Quiero confesarte que no me interesaba para nada tu lugar en la clase de literatura, solo quería sentarme con vos para estar cerca de vos. Cuando comenzamos los retos, sentía que cada día estaba enamorándome más de vos. Al principio no quería aceptar que era eso. Amor. Sabía que vos no sentirías lo mismo por mi y lo oculté, pero me fue tan fácil quererte que eventualmente terminé diciéndotelo. El día que me dijiste que me amabas por primera vez fue el día que sentí que algo se arreglaba dentro mío. Recuerdo tus palabras exactas: “Estás loco, pero me haces feliz y por eso te amo.” No puedo decirte con exactitud que fue lo que se arregló dentro mío pero creeme que desde el accidente sentía que algo estaba roto y vos lo arreglaste. Tengo que agradecer a quien sea que te puso en mi vida, porque Dios solo sabe lo que sería de mi si vos no hubieras aparecido. Y sé que soy un desastre, que no puedo subirme a un auto ni siquiera puedo soportar escuchar el freno de los autos porque mi corazón empieza a latir desbocado, sé que de la única manera que no tengo pesadillas es con vos a mi lado y que no puedo evitar meterme en una pelea cada tanto, sé que tomé muchas decisiones incorrectas en mi vida pero si hay algo que hice bien sos vos. Vos sos la mejor decisión que tomé en mi vida. Quiero que sepas que jamás olvidaré todo lo que pasamos, toda nuestra historia, todo lo que me enseñaste y espero que vos tampoco lo hagas. Lamento todas nuestras discusiones aunque no lamento ninguno de los besos de reconciliación, perdóname si alguna vez te herí de alguna manera, pero tenes que saber que siempre quise y querré lo mejor para vos. Amo cada parte de vos, amo como te concentras cuando lees un libro y como agarras la hoja siguiente, como si no pudieras esperar a saber lo que esta por venir, amo como defendes a los que amas y como tratas a mi hermana, amo la manera en que me besas y amo que llegues tarde a todos lados, amo el hecho de que no sepas mentir y lo roja que te pones cuando
te avergonzas. Te amo, amo todo de vos y siempre lo haré. Pase lo que pase siempre serás mi puerto seguro.

Feliz cumpleaños...

Con amor, Peter ❤



Y se acabó Laliter!! Y encima estamos llegando al final de la novela.. espero que al menos si aiga final feliz :)

GRACIAS por tan pero taaan lindos mensajes del cap anterior, me llegaron al alma jajaja! Primer capitulo de la maratón, en un rato subo el otro ❤❤