jueves, 25 de diciembre de 2014

8º BAJO SU PIEL ❤



   CAPITULO 8:



Cuenta Lali

Estiré la mano y le di un codazo a Euge en la pierna para despertarla. Había estado dormida por las últimas horas. Estábamos fuera de Rosemary Beach y necesitaba que ella manejara, así yo podría buscar la camioneta de Simón en todos los moteles baratos.

Euge:¿Ya llegamos? —murmuró soñolienta y se sentó en su asiento—

Lali:Ya casi. Necesito que manejes. Voy a buscar la camioneta de Simón

Euge dejó escapar un suspiro de cansancio. Yo sabía que ella estaba haciendo esto sólo con la esperanza de traerme a Rosemary y mantenerme allí. No le importaba a Simón. Pero yo necesitaba un aventón. Iba a viajar con Simón a casa. Y nosotros íbamos hablar. Él no tenía por qué haber venido a buscar a Peter. Sólo esperaba que no le hubiera sobre lo que me encontró comprando.

No era que quisiera ocultárselo a Peter. Era sólo que aún no he asimilado nada. Necesitaba procesarlo. Averiguar lo que quiero hacer. Luego contactaría a Peter. Simón yendo detrás de él no era lo que yo quería. Aún no podía creer que lo había hecho.

Euge:Detente allí. Necesito entrar y tomar un café con leche —hice lo que me pidió y estacioné frente al Starbucks— ¿Quieres algo? —preguntó mientras abría la puerta—

No estaba segura de si la cafeína era buena para el... para el bebé. Negué con la cabeza y esperé hasta que ella saliera del auto antes de dejar escapar el sollozo en mi pecho que había estado esperando. No había pensado sobre lo que significaba esas dos rayas color rosas. Un bebé. El bebé de Peter. Oh, Dios.

Salí del auto y caminé alrededor de la parte delantera para sentarme en el lado del pasajero. Para el momento en que estaba dentro y con el cinturón de seguridad, Euge se dirigía hacia el auto. Ya se veía un poco más despierta. Alejé los pensamientos sobre mi bebé y me concentré en la búsqueda de Simón. Podría pensar en mi futuro, en el futuro de mi bebé, después.

Euge:De acuerdo. Tengo cafeína. Estoy lista para ir a buscar a este tipo

No la corregí. Sabía que ella sabía su nombre. Yo lo había usado varias veces. Sólo estaba negándose a reconocerlo. Esta era su forma de rebelión. Simón representaba a Sumit, y ella no me quería en Sumit. En lugar de irritarme, me gustaba. Me quería con ella y eso se sentía bien.

Lali:Él dejó Rosemary por los precios de las habitaciones de hotel. Así que, está en algún lugar accesible.. ¿Puedes llevarme alguno de esos? —pregunté—

Asintió pero no me miró. Estaba enviando un mensaje de texto. Genial. Necesitaba que se concentrara y ella muy posiblemente estaba diciéndole a Nico que ya casi llegamos. No quería que Nico supiera algo.

***

Manejamos por treinta minutos, yo revisaba los estacionamientos de los moteles más baratos en la ciudad. Esto se estaba volviendo frustrante. Él tenía que estar aquí en algún lado. 

Lali:¿Puedo usar tu teléfono? Voy a llamarlo de nuevo y hacerle saber que lo estoy buscando. Me dirá dónde está cuando sepa que he conducido hasta aquí

Euge me dio su teléfono y rápidamente maqué el número de Simón. Sonó dos veces.

Simón:¿Hola?

Lali:Simón. Soy yo. ¿Dónde estás? Estoy a las afueras de Rosemary y no puedo encontrar tu camioneta

Simón:—hizo silencio— Maldita sea

Lali:No te enojes. Necesitaba ver cómo estabas. Vine aquí para llevarte a casa. 
Sabía que estaría frustrado de que hubiese venido tan cerca de Rosemary nuevamente.

Simón:Te dije que estaría en casa una vez que durmiera, Lali. ¿Por qué no podías quedarte donde estabas? —gruñó—

La irritación en su voz me enojó. Pensaría que él no estaba feliz de que hubiera venido a ver cómo estaba.

Lali:¿Dónde estás, Simón? —le pregunté—

Y luego lo escuché. Una voz femenina de fondo. El teléfono fue tapado. No hacía falta ser un genio para darse cuenta que Simón estaba con una chica y trataba de esconderlo. Esto me molestó. No porque pensaba que Simón y yo teníamos una oportunidad, si no porque él me había dejado pensar que estaba herido y solo en una ciudad extraña. Idiota. 

Lali:Escucha. No tengo tiempo para más de tus estúpidos juegos, Simón. Ya he pasado de ellos. La próxima vez, intenta no fingir como si me necesitaras cuando es obvio que no

Simón:Lali, no. Escúchame. No es lo que piensas. No puedo dormir después de que llamaste así que volví a la camioneta y regresé a casa. Quería verte

Un grito de enojo por parte de la chica vino del otro lado del teléfono. Estaba cabreando a quien sea que estaba con él. El chico era un idiota.

Lali:Haz que tu compañía se sienta mejor. No necesito una explicación. No necesito nada de ti. Nunca lo necesité

Simón:¡LALI! ¡NO! Te amo, nena. Te amo mucho. Por favor, escúchame —suplicó, y la chica que estaba con él se puso más histérica— ¡Cállate Melody! —rugió y supe que estaba de vuelta en Sumit. Estaba con Melody—

Lali:¿Fuiste con Melody? ¿Volviste a casa, dejándome preocupada, y fuiste a ver a Melody? Eres ridículo, Simón. ¿En serio? Esto no me lastima. Ya no puedes hacerme daño. Pero detente y piensa sobre los sentimientos de otros, para variar. Sigues arrastrando a Melody con tu comportamiento y eso está mal. Deja de pensar con tu pene y madura

terminé la llamada y le di a Euge su teléfono. Sus ojos estaban muy abiertos mientras me miraba.

Lali:Él volvió a Sumit —le dije en forma de explicación—

Euge:Sí... escuché esa parte —dijo lentamente—

Ella esperaba que agregara más. Merecía más. Me había traído hasta aquí. También era la única amiga verdadera que tenía. Simón no era un amigo. No uno verdadero. Un amigo verdadero no seguiría haciendo cosas estúpidad como las que él hacia.

Lali:¿Puedo quedarme en tu casa esta noche? No creo que valla a volver allí. Iba a irme pronto de todos modos. Averiguaré a dónde voy a ir mañana y luego, cuando llegue allí, haré que Raquel T me envíe el resto de mis cosas. No es que tenga mucho, de todos modos. Mi camioneta está en el cementerio. Nunca haría el viaje de nuevo

Euge:—asintió y arracó el auto y salió hacia la carretera— Puedes quedarte conmigo todo el tiempo que necesites. O más —respondió—

Lali:Gracias  —dije antes de apoyar mi cabeza hacia atrás en el asiento y tomar una respiración profunda—

¿Qué iba a hacer ahora?

***

El olor del tocino se hizo más espeso cuando más lo inhalaba. Era como si el tocino estuviera apoderándose de mis sentidos. Antes de que pudiera abrir los ojos completamente, mis pies estaban en el suelo y corría hacia el baño.

Por suerte, el apartamento de Euge no era tan grande y no tenía mucho que correr.

Euge:¿Lali? —me llamó la voz de Euge desde la cocina, pero no podía detenerme—

Cayendo sobre mis rodillas en frente del inodoro, agarré el asiento de porcelana con ambas manos y comencé a vomitar todo en mi estómago hasta que nada más que nauseas sacudían mi cuerpo. Cada vez que pensaba que había terminado, olía la grasa del tocino mezclada con mi vómito y comenzaba de nuevo.

Estaba tan débil que mi cuerpo temblaba cuando trataba de vomitar y nada más salía. Un paño frío estaba en mi cara y Euge se encontraba de pie junto a mí para tirar de la cadena y luego recostándome contra la pared. 

Sostuve el paño sobre mi nariz para bloquear el olor. Euge lo notó y cerró la puerta del baño. Después de encender el ventilador, colocó sus manos en las caderas y me miró. La incredulidad en su cara me confundía. Me enfermé. ¿Qué tenía de extraño eso? 

Euge:¿Tocino? ¿El olor del tocino te hace vomitar? —negó con la cabeza, aún mirándome como si no pudiera creerlo— No me lo ibas a decir, ¿verdad? Ibas a poner tu loco culo en un maldito autobús y largarte. Tú sola. No te lo puedo creer, Lali. ¿Qué pasó con la chica lista que me enseñó a no dejar que un hombre me usara, eh? ¿A dónde diablos se fue? Porque tu plan apesta. Mucho. No puedes huir. Tienes amigos aquí. Vas a necesitar amigos... y yo esperaría que tuvieras la intención de decirle a Peter sobre esto también. Te conozco lo suficientemente bien como para saber que ese es su bebé

¿Cómo lo sabía? Sólo vomité. Muchas personas se contagian de virus.

Lali:Es un virus —murmuré—

Euge:No me mientas. Era el tocino, Lali. Estabas durmiendo tan pacíficamente en el sofá y al minuto que comencé a cocinar el tocino comenzaste a hacer sonidos extraños y a dar vueltas en el sofá. Luego saliste disparada como una bala para vomitar hasta las tripas. No es ciencia especial, nena. Quita esa mirada de sorpresa de la cara

No le podía mentir. Ella era mi amiga. Posiblemente la única ahora. Tiré de mis rodillas hasta mi barbilla y envolví mis brazos alrededor de mis piernas. Esta era mi manera de mantenerme en una pieza. Cuando sentía que el mundo estaba quebrándose a mi alrededor y no podía controlarlo, siempre me mantenía unida de esta manera.

Lali:Por eso Simón vino aquí. Me encontró  comprando pruebas de embarazo ayer. Sé que es por eso que vino aquí. Para preguntarle a Peter... para preguntar sobre la relación de Peter y yo. Es algo de lo que me niego hablar con Simón. En lo absoluto. Luego tuve un retraso. Dos semanas de retraso. Pensé que compraría un par de pruebas y saldrían negativas y todo estaría bien —detuve la explicación y apoyé la mejilla contra mis rodillas—

Euge:Las pruebas... ¿fueron positivas? -preguntó—

Asentí pero no la miré.

Euge:¿Ibas a decirle a Peter? ¿O en serio ibas a escapar?

¿Qué haría Peter? Su hermana me odiaba. Su madre me odiaba. Odiaban a mi madre. Y yo odiaba a mi padre. Para que Peter sea parte de la vida de este bebé él tendrá que dejarlas. Yo no podía pedirle que deje a su mamá y a su hermana. Incluso si ellas son malvadas. Él las amaba. Y no dejaría a Mery. Ya había aprendido que cuando se trataba de mí o de Mery, él elegiría a Mery. Lo había hecho al final. Cuando yo había descubierto todo. Él guardó su secreto. Él la había escogido a ella.

Lali:No se lopuedo decir —dije en voz baja—

Euge:¿Por qué no? Él querría saberlo y su culo necesita ser un hombre y estar allí para ti. Esa mierda de escapar es estúpida

Ella no lo sabía todo. Sólo sabía un poco. Había sido la historia de Mery la que se contó, y la de nadie más a los ojos de Peter. Pero yo no estaba de acuerdo. También era mi historia. Mery aún tenía a sus padres y a su hermano. Yo no tenía a nadie. Mi made estaba muerta. Mi hermana estaba muerta. Y mi padre podría estar también muerto. Así que esta historia era tanto mía como de ella. Tal vez hasta más.

Levanté mi cabeza y miré a Euge. Ella era mi única amiga en el mundo y si yo iba a contar esta historia, entonces era a ella a quién quería contársela.


Hola! perdón por no subir estos dias, no tengo compu y tengo que escribir desde el celular. Besos a toodas ❤

Y respondiendo a 2 comentarios... la novela NO tiene horario para subir capitulos... y para unirse al GRUPO de whatsapp tienen que mandarme sus numeros de Celulares a tu.nenita.1994.cat@gmail.com CON EL CODIGO. Ej:+34, +57, +52, +58


14 comentarios:

  1. que le digaaa.. subi otrooo plissssssss

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  2. Cori sube masas y que le diga o si no te saco de mi nove jajajajaja

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  3. Cori ya que no has podido subir por lo de la copu hace maraton!! Dalee

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  4. Maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas...
    Angy... =)

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  5. Estando con Euge ,tendrán más oportunidades.
    FELICES FIESTAS!!!!

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  6. Holisssss Plisss Pasen Por Mi Blog Ah Cori El Cap Esta Buenisimo

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    1. Pon la forma fácil d comentar nombre , y a ser posible sin verificación d palabras.
      Gracias.

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  7. Espero que hagas maratón a la vuelta ehhhh. Nos estas haciendo padecer jajaja
    Marta :)

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