14° BAJO NUESTRA PIEL ❤

   CAPITULO 14:   3/4

Cuenta Peter:

Con Lali a mi lado durante la cena no iba a ser capaz de concentrarme en Mery. Iba a estar protegiendo a Lali. Cuando Mery
despertó de su coma y supo del bebé, parecía haberse descongelado un poco con Lali. Luego se enteró que Carlos no era su padre. Que Raúl lo era.

Había estado fuera de control desde entonces. Entendía su deseo de tener
un padre que la quisiera. Yo había odiado a Carlos Esposito durante años por el hecho
de que mi pequeña hermana estuviera tan destrozada. Pero no había sido su culpa. Mi madre debió haber sido honesta, y el jodido de Raúl debió haber dado un paso al frente, como mi padre, y haber hecho algo al respecto.

Lali apretó mi mano con fuerza a medida que entrábamos en el comedor. Escaneé la habitación y me sentí aliviado de que Mery todavía no estuviera allí. Quería que Lali se sentara y relajara antes de que mi hermana apareciera.

Xxx:Pediste esta reunión familiar y llegas tarde

Raúl arrastró las palabras mientras se recostaba en la silla y miraba a Lali. Estaba comenzando a odiar al tipo. Por varias razones.

Peter:Mery no está aquí todavía. No llegamos tarde –respondí y guié a Lali al
otro extremo de la mesa, la senté junto a papá y tomé la silla a su lado–

J.Pablo:Está raro. Comenzó a beber ron temprano –le explicó a Lali–

La mirada de disculpa en el rostro de mi padre me recordó que él no era tan cruel
como su amigo. Ya sabía eso. Él no me había ignorado. Pero Raúl no había ignorado a Rocio, tampoco. Sin embargo, me preguntaba cómo habría sido si la madre de su madre si no la hubiese tomado. Raúl sólo suministraba el dinero. Su abuela la había criado. Él sólo aparecía con ponis y promesas que nunca mantuvo.

Raúl:Sólo estoy siendo yo –gritó desde el otro lado de la mesa– ¿Estás manteniendo a tu linda chica lejos de mí, no? –dijo con una risa– Sólo estoy mirando, chico. No es como que si la fuera a tocar. Ella lleva a tu hijo. Me mantengo alejado de las embarazadas. No quiero que me culpen de tener más hijos

Lali se tensó a mi lado y puse mi mano en su pierna. Esto no era algo que debía molestarla. Era bueno. Incluso si quería que él dejara de mirarla.

Rochi:Papi, deja a Peter y a Lali en paz. Molestándolos sólo haces que todo el
mundo se incomode –dijo–

Ella había estado sentada tranquilamente al
lado de Raúl. Raramente hablaba, así que no estaba acostumbrado a su suave voz.
Todavía me asombraba que este tipo la hubiese hecho. No era nada como él. Ella
era la única persona que podía hacer que se calmara. Su voz parecía tranquilizarlo.

Raúl:Está bien, querida. No quiero arruinar tu cena. Sólo me estaba divirtiendo

Rochi:Sin diversión –respondió ella en una suave orden–

Lali–agachó la cabeza a mi lado– Me agrada mucho Rocio –susurró tan suave que casi no la escuché–

Sonreí. No había estado equivocado sobre Rocio si a Lali le agradaba. Ella era una genuina chica buena. Mery le iba a dar el infierno.

El fuerte sonido de tacones golpeó el suelo de mármol que llegaba al comedor. Me tensé y preparé para Mery. Ella se abalanzó en la habitación vistiendo un corto y esponjoso vestido azul como el hielo y tacones, su largo cabello estaba en lo alto de su cabeza con rizos que caían alrededor de su cara. Se había asegurado de verse bien para esto. Esa era Mery. Noté como sus ojos observaban a todo el mundo en la mesa.

La mirada irritada con la que miró a Lali no era nada comparada con la llena de odio que le lanzó a Rocio. Esperé a ver si decía algo que necesitara callar.

Rocio mantuvo su mirada baja y jugó con la servilleta en su regazo. La tensión en la habitación era obvia, y odiaba que Mery pensara que tenía que hacer esto para llamar la atención.

Xxx:Siéntate, chica, y deja de estar parada ahí gruñendo. Queremos comer –dijo Raúl con ligereza y los ojos de Mery lo miraron airadamente–

Observó al otro lado del asiento de Raúl y luego caminó para sentarse al lado de mi padre. La pequeña niña en ella todavía tenía miedo de ser rechazada. Sabía que mi padre no la iba a rechazar.

Mery:No sabía que la habías traído

Lali estaba tan tensa a mi lado que quería abrazarla hasta que se relajara.

Peter:Por supuesto que lo hice. Va a donde yo voy

Mery:–rodó los ojos– Extraño al viejo Peter

Peter:Yo no –respondí–

Mery:Este es un asunto familiar. ¿Crees que puedes mantenerte unos momentos lejos de él o planeas asfixiarlo por el resto de su vida?

El dolor de Mery se estaba convirtiendo en amargura rápidamente. Sin embargo, no iba a desquitarse con Lali.

Me incliné sobre la mesa y nivelé su mirada fija.

Peter:Nunca más le hables de esa manera. Si ella no hubiera aceptado venir conmigo, no habría venido. No subestimes su importancia. Ella es mía. Respeta eso

Mery se erizó y se recostó en su silla. Odiaba hablar de esa manera cuando sabía que le estaba haciendo daño. Pero Lali estaba primero. Siempre.

Raúl:Me muero de hambre. ¿Dónde está la maldita comida? –gritó fuertemente–

 Dos mujeres en sus veinte llegaron corriendo con bandejas. Normalmente no había camareras por aquí. Papá y Raúl no iban a lo grande en cenas formales. Pero papá había llamado a una empresa de catering para manejar la cena de esta noche. La mujeres tenían una mirada de fascinación en sus ojos mientras ponían los aperitivos en la mesas y tomaban las órdenes de las bebidas.

Raúl:Mírate –dijo mientras deslizaba una mano por la pierna de una de las mujeres–

Rochi:Papi, no –susurró–

Raúl:–dejó escapar una risa dura y guiñó un ojo a la camarera– Más tarde te veo

Mery:Dios. No puedo creer que mi madre haya dormido con ese hombre –dijo un poco demasiado alto–

J.Pablo:No vayas por ahí, María –advirtió–

 Ya era demasiado tarde. Pude ver la molesta diversión en los ojos de Raúl

Raúl:¿Por qué no? Soy un jodido Dios del rock, niña. Un jodido. Dios. Del. Rock –tomó un sorbo de su bebida y sonrió– Todas las mujeres quieren una probada. Tu mami no fue la excepción

Rocio:Papi, por favor –dijo estirando la mano y tocando su brazo ligeramente–

Mery:Mi madre era demasiado joven para ser más sabia –disparó en respuesta–

Raúl:No era tan joven. Sólo estaba intentando hasta lo imposible dormir con
cada uno de nosotros. Creo que se puede decir que oficialmente puede aclamar el
récord de “Se ha follado a todo Slacker Demon” y esa no es una tarea fácil. Pablo es
más exigente que la mayoría

El rostro de Mery palideció y sabía que tenía que intervenir antes que esto se
saliera de control.

Peter Gracias, Raúl, por asegurarte de que fuéramos conscientes de los hábitos sexuales de nuestra madre cuando era más joven. Ahora, ¿podemos pasar de eso y tratar de llevarnos bien?

Raúl:–asintió– Por supuesto. Vamos a comer algo de esta mierda

Las meseras rápidamente comenzaron a caminar alrededor de la mesa con bandejas de comida y preguntándonos qué queríamos. Lali rechazó casi todos los aperitivos. Sólo tomó una rebanada de pan.

Peter:¿Por qué no estás comiendo más que eso? –pregunté preocupado–

Se inclinó hacia mí para que nadie más pudiera oírla

Lali:Porque no puedo comer carne cruda o quesos con leche sin pasteurizar mientras estoy embarazada

Mierda. Algo más que no sabía. Empujé mi silla y me dirigí a la cocina. Iban a hacer algo que ella pudiera comer.


Tercer capítulo de hooy! ¿les vas gustando? Quiero ver esos comentarios con las opiniones.. ❤❤